Que el agua forma parte fundamental de nuestro organismo es algo sabido. De hecho, es el elemento más abundante en el mismo. La encontramos en el líquido intracelular y también en el extracelular, tanto en el llamado liquido intersticial (que es un líquido que baña las células) como en el plasma, es decir, en el líquido que forma parte de la sangre. Nuestro organismo se ocupa de mantener el equilibrio entre los niveles de agua y los solutos tanto en el líquido intracelular como en el extracelular. Cuando se rompe ese equilibrio se produce lo que se conoce como retención de líquidos o hidropesía. La retención de líquidos afecta a un altísimo porcentaje de población y, pese a no producir, salvo en casos excepcionales, dolor, sí puede provocar una molesta y constante sensación de cansancio muscular.
El exceso de agua o líquidos en nuestro cuerpo es uno de los motivos que hacen que muchas veces nos sintamos pesadas o hinchadas. Habitualmente, la acumulación de fluidos se nota en el vientre y en las extremidades, especialmente en los pies y las piernas.
Causas de la retención de líquidos
Entre las causas que pueden provocar ese desequilibrio en la regulación de los niveles de agua que da lugar a la retención de líquidos podemos destacar las siguientes:
- Hidratación incorrecta.
- Consumo elevado de alimentos ricos en sal.
- Seguir un estilo de vida sedentario. El estar muchas horas sentada o de pie, sin caminar ni moverse, puede provocar que nuestro organismo retenga líquidos.
- Cambios hormonales debidos al embarazo o la ovulación.
- Consumo de determinados medicamentos. Los estrógenos, los corticoesteroides, los antiinflamatorios no esteroides y los fármacos para la tensión arterial pueden provocar la retención de líquidos.
En muchas ocasiones, la retención de líquidos no es tanto una enfermedad en sí como el síntoma de padecer una enfermedad. Las enfermedades derivadas del corazón, el hígado o los riñones pueden provocar, entre otros síntomas, la retención de líquidos.
Consejos para evitar la retención de líquidos
La mujer que padezca retención de líquidos o tenga tendencia a padecerla debe tener en cuenta una serie de consejos que le servirán para evitarla o, en su caso, para aliviarla o solucionarla. Dichos consejos son los siguientes:
- Moderar el consumo de sal. Para ello, no solo hay que cocinar con poca sal; hay que evitar también alimentos ricos en sal como pueden ser los alimentos precocinados, los congelados, las conservas, las aceitunas, las patatas fritas, los quesos, los ahumados o los embutidos.
- Beber al menos 1,5 litros de agua al día. Hidratarse correctamente es fundamental para vencer la retención de líquidos. Gracias al aporte de agua que le proporcionemos, nuestro cuerpo podrá eliminar toxinas y reestablecer el equilibrio hídrico. Para mejorar la hidratación también es aconsejable incluir infusiones y caldos en la dieta diaria.
- Llevar una vida activa. Como hemos indicado anteriormente, la vida sedentaria incrementa el riesgo de padecer retención de líquidos. La práctica rutinaria de deporte, por el contrario, sirve para evitar la hidropesía.
- Utilizar medias elásticas. Las medias elásticas, al presionar sobre los vasos sanguíneos, mejoran el retorno venoso.
Finalmente, el último consejo a tener en cuenta para luchar contra la retención de líquidos consiste en seguir una alimentación variada y equilibrada en la que tengan una importante presencia lo que se conoce como diuréticos naturales.
Los mejores diuréticos naturales
Los diuréticos naturales, además de ayudar a combatir la inflamación provocada por la retención de líquidos, ayudan a perder peso sin tener efectos secundarios y, al mismo tiempo, aportan un extra de nutrientes a nuestro organismo.
Los diuréticos naturales están compuestos en gran parte de agua y de sustancias antioxidantes. Estas sustancias antioxidantes, cuando han sido asimiladas por el organismo, sirven para regular la cantidad de fluidos que se generan en el cuerpo y para optimizar las funciones renales.
Entre los diuréticos naturales que pueden ayudarnos a luchar contra la retención de líquidos podemos destacar:
- Sandía. Su alta composición de agua hace de la sandía un magnífico diurético natural. Al mismo tiempo, esta fruta es altamente desintoxicante y ayuda a proteger las células del efecto de los radicales libres.
- Tomate. Al igual que la sandía, el tomate es muy rico en agua y previene también contra los radicales libres. Entre los antioxidantes que contiene podemos destacar la vitamina C, el betacaroteno, el licopeno y el selenio.
- Pepino. Más allá de su alto contenido en agua, este diurético natural destaca por su alto contenido el azufre y silicio. Estos dos componentes ayudan a los riñones a eliminar el ácido úrico.
- Zanahoria. Además de por ser un diurético natural de primer orden, la zanahoria destaca por sus propiedades antiinflamatorias y desintoxicante. En zumos o en ensaladas, incluir la zanahoria en la dieta es una buena manera de luchar contra la retención de líquidos.
- Berenjena. Este diurético natural ayuda a mejorar la circulación y sirve para combatir la inflamación asociada a la retención de líquidos.
- Apio. Las semillas de apio, que incrementan la excreción de ácido úrico, aumentan también la tasa de producción de orina del organismo.
- Uva. Siendo muy bajas en sodio y ricas en antioxidantes que favorecen la eliminación de toxinas, las uvas se revelan como un magnífico diurético natural.
- Espárrago. Este vegetal, habitualmente muy recomendado por los dietistas en las dietas de adelgazamiento, tiene importantes propiedades antiinflamatorias y es un excelente diurético natural.
- Lechuga. Si hay un vegetal verde útil para hacer frente a la retención de líquidos, ése es la lechuga. Además de favorecer la expulsión de toxinas y de mejorar la circulación, la lechuga aporta interesantes dosis de magnesio, hierro y potasio que sirven para optimizar las funciones del sistema renal.
- Té verde. Este tipo de té debe ser incluido en el listado de diuréticos naturales por su capacidad para favorecer la expulsión de líquidos. Eso sí: no debe abusarse de él, por lo que no es recomendable tomar más de cuatro tazas al día.
- Perejil. Excelente para estimular la purificación tanto de los riñones en particular como del sistema urinario en general, el perejil puede servir también, aunque en menor medida que otros vegetales, como diurético natural.
Finalmente, a la hora de diseñar una dieta que sirva para luchar contra la retención de líquidos hay que tener presente que es importante incluir en ella alimentos que sean ricos en potasio, ya que este mineral desempeña un papel fundamental a la hora de regular los niveles de agua del organismo.
¿Qué alimentos son ricos en potasio? Las legumbres, el calabacín, las patatas, los champiñones y algunas frutas. Entre éstas podemos distinguir el plátano, el albaricoque y la piña como frutas diuréticas.
Esperamos que los consejos dados en este artículo te sirvan para luchar contra la retención de líquidos.