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Marcas de joyería
Pandora
Swarovski
Tous
Emporio Armani
Guess
Tommy Hilfiger
Fossil
Thomas Sabo
Lotus
Orovi
En el look de la mujer nunca han faltado las joyas. Eso ha sido así desde los tiempos más remotos. Basta con asomarse a los museos de cultura antigua para descubrirlo. Las piezas de joyería siempre han servido para dar a la mujer un aire más distinguido y para complementar su vestuario. Muchas mujeres, de hecho, sienten que les falta algo si no llevan puesta algún tipo de joya.
La joyería en la Historia
No podemos separar la historia de la joyería de la historia del hombre. Desde que el mundo es mundo, el hombre ha utilizado materiales muy diversos para crear adornos que sirvan para aportar distinción a quien los luce.
Muchos siglos antes de que nacieran marcas como Pandora, Swarovski, Tous, Guess o Emporio Armani, las mujeres de Grecia, Roma, Mesopotamia o el Antiguo Egipto ya lucían joyas.
La historia de la humanidad es, también, la historia de una evolución de la joyería tanto en el diseño de las diferentes piezas (pendientes, collares, broches, coronas, tiaras, pulseras, anillos, abalorios, gemelos, diademas, gargantillas, piercings…) como en la elección de los materiales con los que dichas piezas se elaboran y su color.
Una joya es, en buena medida, un símbolo de feminidad y un elemento que ayuda a resaltar la belleza natural de la mujer. También es, según apuntan algunos estudios realizados desde el campo de la Psicología, algo que sirve para alcanzar aceptación social y autoestima. La joyería es, pues, el resultado de una necesidad psicológica: la que tiene el ser humano por cuidar de su propia imagen.
Hablar de joyas es, también, hablar de objetos que tienen un valor. Ese valor, no es, en la inmensa mayoría de los casos, un valor de uso. Así, ¿qué tipo de valor es el que tiene una gargantilla, un collar, un pendiente o un anillo? Uno en el que se entremezclan lo simbólico, lo sentimental, lo artístico y, por supuesto, lo monetario.
El valor de cambio de una joya depende en gran medida de los metales y piedras preciosas con los que esté elaborada y de su diseño, acabado y originalidad. Pero ese valor de cambio no depende solo de eso. Pertenecer a una determinada marca también otorga un determinado valor extra a una joya. Por ejemplo: que sea Tommy Hilfiger o Fossil otorga a una pulsera un plus de exclusividad que se refleja en su coste.
Finalmente, y antes de prestar atención a diferentes tipos de joyas y a su simbología y modalidades, resaltaremos que estos pequeños adornos de los que estamos hablando pueden servir:
- Para llevarlos pegados al cuerpo
- Para complementar la ropa
- Para recoger el pelo
Pendientes
El pendiente es una pieza clásica destinada a adornar las orejas. Antes de que aparecieran en los escaparates de nuestras joyerías los pendientes Tous o los pendientes Pandora, ya los antiguos egipcios los utilizaban y colocaban en el lóbulo de las orejas.
Ya en aquellos tiempos, y según puede comprobarse en manuales y museos, existían modas. Una de ellas, llamativa: durante mucho tiempo, los niños romanos lucían pendientes en una sola oreja.
A los pendientes se le ha otorgado alguna vez efecto de talismán. Con ellos puestos, los malos espíritus no entran por las orejas.
Tradicionalmente, los pendientes se dividen según sea su cierre. Así, pueden ser:
- Omega
- Catalán
- Criolla
- Ballestilla
- De presión
- Clásico
- De rosca
En cuanto a su diseño, podemos distinguir entre los aretes o aros y los colgantes con todo tipo de forma o figura.
En los últimos tiempos también se han puesto de moda los piercing y los pendientes trepadores. Estos últimos siguen el perfil de la oreja.
Pulseras
Uno de los tipos de joyas más antiguas que existen es la pulsera. En el Neolítico ya se empleaba. Mujeres y hombres de las civilizaciones antiguas ya adornaban sus muñecas con ellas. Según sus creencias, los metales con los que estaban hechas guardaban relación con el cosmos y, al hacerlo, influían en la vida y el destino del hombre.
En la actualidad, orfebres y joyeros diseñan y fabrican verdaderas obras de arte. Dentro de ellas podemos encontrar los siguientes tipos:
- Pulseras de eslabones o cadenas. Éste es la pulsera más común. Puede llevarse sola o con algún colgante.
- Nomeolvides. En este caso, la pulsera está formada por una placa de metal que lleva una inscripción y que está unida por una cadena.
- Brazaletes. Llevan adornos como piedras o gemas.
- Cuff o rígida. Aro rígido abierto o cerrado y de diferentes grosores.
- Esclava. Este tipo de joya para la muñeca es rígio y muy ancho.
- De cordón. Con cierta flexibilidad, se pueden acompañar de colgantes.
- Tenis o Riviére. En esta variedad, diversas piedras preciosas se unen una a la otra mediante un hilo.
Aparte de estos tipos de pulsera también podemos encontrar las tejidas (de origen artesanal y hechas por hilos de colores que forman dibujos o patrones), las de goma (que suelen comercializarse con fines solidarios y que no formarían parte de lo que entendemos como joyería), las de cuero (ligadas estrechamente al estilo masculino) y las de silicona.
Al hablar de las diferentes variedades de pulseras hay que referirse también a las pulseras tobilleras. Éstas, como su propio nombre indica, se colocan en el tobillo y suelen ser de tipo cadena con colgantes.
Collares
Éste es un tipo de adorno que se cuelga del cuello y que se divide, según su longitud, en las siguientes categorías:
- Gargantilla. Llamado también Choker, esta modalidad de collar mide entre 30 y 40 cm de largo. Es un adorno, pues, que va muy pegado al cuello.
- Babero. Enganchado al cuello como la gargantilla, éste tipo de collar es muy ancho y está lleno de piedras.
- Princesa. Algo más largo que el anterior (entre 43 y 48 cm), realza el cuello de una forma especial.
- Matiné. Si se desean llevar amuletos y colgantes, éste es el collar ideal. Mide entre 50 y 60 cm.
- Ópera. ¿Estás orgullosa de tu escote y deseas lucirlo? Pues éste es el modelo que necesitas. Su longitud oscila entre los 71 y los 86 cm.
- Coco Channel o cuerda. Mide hasta 100 cm y sirve para hacer nudos y también para juguetear con él mientras se lleva puesto.
- Varias hebras. Semejante al anterior, éste posee cadenas grandes, conchas, gemas…
- Rope. Este collar, de tipo cordón, lleva un colgante.
- Sautoir. Este tipo de collar, muy largo y con una borla al final, es ideal para lucir cuando se lleva una prenda con escote muy pronunciado.
- Riviére. Este adorno para el cuello está formado a partir de la unión de varias gemas de distintos tamaños.
- Lavaliére. Colgante rígido y muy ancho que se abrocha con una cadena.
Anillos
Los dedos, tanto de la mano como de los pies, es una de las partes de nuestro cuerpo que parecen exigir la presencia de una joya o de un adorno. Los anillos es una de las joyas con mayor carga simbólica. Hay, por ejemplo, anillos de boda y anillos de compromiso. Y hechos, por supuesto, en muchos materiales: oro, plata, platino, paladio, titanio, carbono… La lista podría ser interminable. Durante muchos siglos se hicieron de hierro y de una forma tosca, pero hace ya muchos siglos que se diseñan auténticas obras de arte.
Entre los distintos tipos de anillos podemos distinguir:
- Solitario. Aro que lleva una sola piedra preciosa.
- Tipo sello o roseta. Con la parte superior más ancha con iniciales y/o dibujos.
- De halo. Similar al sello, esta modalidad de anillo posee una piedra central rodeada de otras más pequeñas.
- Toi et moi. Sortija abierta que simboliza a la pareja y que lleva dos piedras en cada extremo.
- Eternity o media alianza. Está formado por gemas agrupadas en carril en la parte alta.
- Pavé o híbrido. Combinación entre la media alianza y la sortija solitaria.
- Trilogía o pasado, presente y futuro. Una alianza de este tipo debe incluir tres elementos para simbolizar lo que se vivió con la pareja, lo que se está viviendo y lo que se vivirá.
- Minimalista o Bridal Set. Sortijas finas que se pueden combinar entre sí.
- Churumbela. Anillo formado por dos líneas o más de piedras que recorren toda la sortija.
- Vintage. Sortija que lleva detalles florales en su parte central.
Más allá de esta tipología, podemos realizar otra según sea la forma de engarce que tenga el anillo:
- Garras. Las piedras o gemas quedan sujetas a la sortija mediante unas pestañas dobladas en forma de gancho.
- Carril o barras. Las gemas descansan sujetas entre dos parerdes exteriores del anillo.
- Bisel o tensión. En este caso, la piedra queda sujeta entre los dos extremos abiertos de una sortija mediante un biselado en los extremos.
- Pavé o grano. Las pequeñas gemas quedan sujetas con granos metálicos, formando una superficie homogénea. Es el tipo de engarce más complejo.
- Carbujón y chatón. En este sistema de engarce se fuerza un aro para abrirse y, al cerrarse, sujeta la gema.
Como ves, son muchas las modalidades de anillos que puedes encontrar en el mercado. Marcas como las ya citadas o también como Lotus, Orovi o Thomas Sabo diseñan y comercializan anillos de muy diversos tipos. Los anillos Pandora o los anillos Tous, por ejemplo, gozan de mucha popularidad en la actualidad.
