Todas sabemos que una buena alimentación y la práctica regular de ejercicio físico son condiciones imprescindibles para lucir una bella figura. Pero todas sabemos también que en ocasiones no basta con eso para lucir la figura deseada. La genética y el paso del tiempo juegan en contra de nuestros deseos y, en ocasiones, arruinan o dificultan que el esfuerzo del ejercicio diario y el estricto control dietético que llevamos a rajatabla dé sus frutos. Para remediar lo que en un principio podría parecer irremediable la medicina estética ha creado una serie de tratamientos corporales de belleza que sirven para paliar los efectos de la celulitis, las arrugas, las varices, las arañas vasculares, etc.

Los principales tratamientos corporales de belleza a disposición de una mujer para moldear su cuerpo o paliar los efectos que el paso del tiempo pueda tener sobre él son los siguientes:

  • Intralipoterapia
  • Lipoescultura corporal
  • Tratamiento de varices y arañas vasculares

Veamos en qué consiste cada uno de ellos.

Intralipoterapia

La intralipoterapia es un tratamiento corporal de belleza consistente en inyectar ácido desoxicólico en aquellas partes del cuerpo en las que se haya acumulado grasa. Estas partes suelen ser el abdomen, los muslos, las caderas, los brazos o las rodillas.

El ácido desoxicólico es un ácido presente en el organismo y, por tanto, las inyecciones del mismo que se practican durante la aplicación de la intralipoterapia son inyecciones biocompatibles.
Con aspecto de una solución acuosa con base gelatinosa, el ácido desoxicólico se inyecta con un solo pinchazo y una aguja extrafina en el tejido adiposo. Una vez inyectado, el ácido desoxicólico licúa la grasa acumulada provocando que los lípidos acumulados en la zona se eliminen, de manera natural, a través del sistema linfático.

Para aplicar la intralipoterapia no es necesario recurrir a la anestesia. Una de sus grandes ventajas el no tener apenas efectos secundarios. Tras una sesión de intralipoterapia, la persona puede experimentar algún ligero escozor y la zona en que se haya realizado la inyección del ácido desoxicólico puede enrojecerse levemente.

Este tratamiento corporal de belleza está vedado a mujeres embarazadas, a lactantes y a todas aquéllas que padezcan diabetes del tipo II.

Lipoescultura corporal

El más popular de entre todos los tratamientos de belleza corporal es la lipoescultura corporal o lipoescultura, una intervención quirúrgica que se utiliza para eliminar los depósitos de grasa subcutánea de lugares tales como los pómulos, el cuello, los senos, los brazos, los muslos o el abdomen.

La lipoescultura corporal se realiza introduciendo una cánula en la zona corporal que se desea esculpir. La cánula se introduce en el cuerpo a través de una pequeña incisión de entre 3 y 4 mm que se realiza en la zona a tratar. Conectada a una máquina de vacío o a una jeringa especial, la cánula se encarga de aspirar la grasa que se desea extraer.

Como intervención quirúrgica que es, la lipoescultura corporal debe realizarse bajo anestesia, bien sea general, bien local, bien epidural dependiendo de la cantidad de grasa que se desee aspirar y de la extensión de la zona a tratar.

La práctica de este tratamiento de belleza corporal puede provocar diversos efectos secundarios. Entre ellos podemos destacar el que los tejidos tratados presenten un edema durante un período de entre 3 y 4 semanas. Esta hinchazón suele tratarse utilizando una faja, unas medias o un vendaje elástico sobre la zona tratada. La faja, además, sirve para controlar el sangrado que pudiera producirse a consecuencia de la intervención.

La recuperación de la lipoescultura corporal es una recuperación lenta. La inflamación de la zona y los hematomas que puedan aparecer en la misma acostumbran a desaparecer entre uno o dos meses después de la intervención, aunque hasta transcurridos tres meses de la realización de este tratamiento de belleza corporal no pueden valorarse los resultados obtenidos con el mismo. En ocasiones, la inflamación, aunque mínima, puede durar más de seis meses.

Si hay un tratamiento de belleza corporal que consigue mejorar la apariencia física ésa es la lipoescultura. Entre las ventajas de la práctica de la lipoescultura corporal podemos destacar las siguientes:

  • Presencia de cicatrices mínimas.
  • Dolor escaso.
  • No se necesitan inmovilizaciones prolongadas.
  • Posibilidad de tratar varias zonas del cuerpo en una sola intervención.
  • Vuelta a la vida cotidiana normal y a la actividad laboral en 4 o 5 días.
  • Posibilidad de combinarse con otras intervenciones estéticas como la dermolipectomía o la reducción del volumen mamario.

Como se ve, son muchas las ventajas de la práctica de la lipoescultura corporal. Por eso son muchas las mujeres que escogen este tratamiento corporal de belleza para esculpir su cuerpo y darle un mejor aspecto. Eso sí: si comúnmente se dice que cualquier tratamiento de belleza corporal debe ser realizado por verdaderos profesionales, en el caso de la lipoescultura corporal la realización de la misma debe ser realizada, obligatoriamente, por un buen equipo de profesionales de la medicina estética.

Tratamiento de varices y arañas vasculares

Unas piernas bien torneadas pueden quedar estéticamente afeadas por la existencia de varices y de lo que se conoce como arañas vasculares, esas pequeñas dilataciones de los más pequeños vasos sanguíneos que llenan las piernas de sinuosas líneas rojas. Para acabar con las arañas vasculares y con las varices suele utilizarse un tratamiento de belleza corporal que recibe el nombre de escleroterapia con microespuma.

¿En qué consiste la escleroterapia con microespuma? En inyectar una concentración de microespuma esclerosante con una aguja extrafina en las arañas vasculares. Esta microespuma lo que provoca en esos vasos sanguíneos es una especie de trombosis controlada. Tras dicha trombosis, la vena pierde su función, se cierra y es reabsorbida por el cuerpo de forma natural.

Este tratamiento de belleza corporal es muy poco doloroso y permite a la mujer llevar una vida normal tras la aplicación del mismo. Tras una sesión de este tratamiento que puede tener objetivos estéticos y también objetivos médicos (en ocasiones se emplea para tratar diversos problemas venosos o para acelerar la cicatrización de las úlceras venosas), la mujer puede trabajar, caminar y llevar a cabo sus actividades cotidianas. Será unas doce semanas después cuando se puedan contemplar los resultados finales de la escleroterapia con microespuma.